Una de las labores más complejos para los gobiernos, en especial en el mundo en desarrollo, es la gestión de la inversión pública. Para que el dinero rinda y logre generar desarrollo de forma eficaz, es preciso que los países tengan la capacidad técnica e institucional necesaria para asegurar que los proyectos seleccionados ofrezcan la tasa de retorno económico y social más alta posible.
En 2010, Surinam elaboró un ambicioso programa de desarrollo con una serie de inversiones del sector público, en particular en infraestructura, con el fin de diversificar la economía e impulsar el crecimiento. En aras de asegurar que el país obtenga el máximo rendimiento de sus inversiones, el BID colabora con el gobierno para poner en marcha una serie de reformas integrales destinadas a mejorar la eficiencia en la gestión del gasto público.
Estas reformas representan un intento mancomunado de planificar, administrar, ejecutar y dar seguimiento al uso de las inversiones públicas a lo largo de todo el ciclo del presupuesto. Para ello se están definiendo criterios claros a la hora de seleccionar y determinar prioridades en cuanto a las inversiones públicas, y se están modernizando los sistemas de administración financiera, adquisiciones, auditoría y control. Con esto, se espera asegurar una mayor transparencia y una mejor rendición de cuentas en los procesos de toma de decisiones y ejecución.
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Por ejemplo, a partir de 2012 todos los proyectos de inversión pública han de estar inscritos en el programa de inversiones del gobierno y quedan sujetos a una revisión oficial por parte del Ministerio de Finanzas, quien verifica su factibilidad técnica, financiera y socioeconómica, así como la forma en que cada uno de ellos se adapta a las prioridades de desarrollo del país.
Durante los últimos dos años, el gobierno ha establecido un mecanismo para identificar proyectos de inversión pública, seleccionarlos, asignarles partidas presupuestarias, darles seguimiento y evaluarlos. Igualmente ha diseñado una hoja de ruta para mejorar la gestión del gasto público, establecido normas para las adquisiciones públicas y creado un portal cuyo propósito es aumentar la transparencia en las compras realizadas por el gobierno.
En 2012, Surinam aprobó un marco conceptual para una nueva ley de presupuesto en el que se esbozan las funciones y responsabilidades de los ministerios, así como la coordinación que se precisa entre estos para agilizar el proceso presupuestario y garantizar que se asignen adecuadamente los recursos destinados a financiar la inversión pública.
El ritmo constante en que se ejecutan las reformas da fe del compromiso de las autoridades en lo que se refiere a transformar el status quo de la situación. Como consecuencia, Surinam está en vías de garantizar que cada centavo de inversión pública arroje el máximo retorno en función del desarrollo.
Lo que ha hecho Surinam para mejorar la gestión del gasto público:
- Seleccionar los proyectos y establecer prioridades en forma adecuada para garantizar que los más importantes ingresan en el proceso presupuestario.
- Mejorar el sistema de gestión de las finanzas públicas de modo que ofrezca las herramientas necesarias para asignar recursos correctamente y supervisar la ejecución de las inversiones.
- Dotarse de un sistema moderno de adquisiciones que resulte más rentable, mejore la calidad del gasto y promueva la competencia.
- Garantizar la transparencia y la rendición de cuentas mediante procesos optimizados de auditoría y control.